Instalaciones auxiliares

Junto con las instalaciones principales ya mencionadas existen otra serie de instalaciones necesarias e imprescindibles para el buen funcionamiento de la instalación, entre las que destacan: tratamiento de efluentes líquidos, sistema de desodorización, sistema de detección y extinción de incendios, e instalación de control.

Sistema de desodorización

La instalación cuenta con un sistema de desodorización y renovación del aire del interior de las naves de tratamiento de modo que cualquier emisión de aire que se realice a la atmósfera pasa previamente por los biofiltros instalados para su purificación.

Uno de los biofiltros, trata el aire procedente de la nave de pretratamiento, la nave de digestión y los fosos de recepción. A través de las toberas situadas en los conductos de acero galvanizado repartidos por las diferentes naves, el aire es conducido hacia el biofiltro por dos ventiladores. El biofiltro cuenta a la entrada con un lavador de gases. Tras el paso por el lavador de gases, el aire pasa a través de una capa de 1,5 metros de altura de material filtrante, en este caso corteza de pino troceada, quedando retenida la práctica totalidad de los olores que el aire procedente de las naves pueda arrastrar. La temperatura del biofiltro es registrada mediante dos sondas y controlada en todo momento para poder mantenerla dentro del rango de funcionamiento óptimo, actuando el sistema automático de riego por aspersión en caso de registrarse desviaciones sobre los parámetros programados.

El otro biofiltro se emplea para depurar el aire contaminado procedente de los túneles de compostaje y de la nave de almacenamiento de compost. El aire procedente de los túneles es impulsado a los biofiltros directamente por los propios ventiladores de cada túnel, mediante colectores en polipropileno. Este aire captado se acondiciona para su posterior tratamiento en el biofiltro. Para que el aire llegue en condiciones adecuadas para favorecer su digestión por bacterias, es necesario mantener unas condiciones de humedad al 100%. Además, en el aire de salida de cada túnel se mide la concentración de amoniaco, de forma que se activa el riego en el lavador de gases en caso de que se supere el límite tolerable, antes de enviarlo hacia el biofiltro. El biofiltro, constituido por una capa de 1,5 metros de altura de corteza de pino trozeada, dispone también de sondas de temperatura, en este caso tres, para poder registrar y controlar las condiciones en que se encuentra el material.

Sistema de detección y extinción de incendios

Dentro de la nave de pretratamiento se ha ubicado el almacén de balas de los productos recuperados. Para proteger y luchar contra el riesgo de incendio dentro de esta nave, se ha instalado un sistema de detección de incendios basado en detectores ópticos de humo, que combinado con una red de rociadores repartidos por toda de instalación, garantiza la detección de posibles incendios en el interior de la nave y su rápido combate.

Instalación de control

Desde la sala de control, localizada en la nave de pretratamiento, se tiene acceso a todos los procesos que tienen lugar en la instalación. Además, desde esta sala es posible controlar los procesos de pretratamiento, compostaje y digestión, siendo posible además visualizar el estado de la instalación de afino y de tratamiento de lixiviados.