La Diputación destinará hasta 300.000 euros a los ayuntamientos que no dispongan de establecimiento de hostelería

El presidente de la Diputación de Salamanca, Javier Iglesias, y el diputado de Presidencia, Carlos García Sierra, en la presentación.

28.12.23.- El presidente de la Diputación de Salamanca, Javier Iglesias, acompañado por el diputado de Presidencia, Carlos García Sierra, informó hoy de un nuevo plan diseñado por la Diputación de Salamanca destinado a ayudar a los municipios que no dispongan de establecimiento de hostelería para que puedan abrir uno y paliar así una de las consecuencias de la despoblación: la soledad no deseada.

Javier Iglesias informó que se destinará a este plan un total de 300.000 euros, con posibilidad de incrementarlo si fuera necesario en futuras convocatorias y en función de la demanda, y podrán acceder al mismo los ayuntamientos que no dispongan de ningún establecimiento de hostelería en activo, por tratarse de un lugar de encuentro y que fomenta la socialización entre los vecinos.

Se trata de un programa de subvenciones de hasta 30.000 euros por municipio, que podrá destinarse a obras de adaptación de los edificios de titularidad municipal para esta finalidad. Asimismo, una parte de esta cantidad podrá dedicarse a la adquisición de mobiliario o maquinaria para prestar el servicio, con hasta un máximo de 3.000 euros en general.

Entre los requisitos para solicitar la ayuda se establece un compromiso de apertura durante todo el año de al menos 2 días a la semana y un periodo de actividad de al menos 5 años. Podrán solicitar estas ayudas los ayuntamientos que quieran abrir un establecimiento de hostelería a lo largo del próximo año 2024 en un local de titularidad municipal y la gestión del mismo podrá ser directa o indirecta y en este último caso, la adjudicación del mismo debe hacerse a través de un sistema que garantice la concurrencia competitiva.

En definitiva, el presidente de la Diputación destacó que se trata de un programa novedoso y con dotación económica suficiente para que los ayuntamientos puedan fomentar la creación de nuevos establecimientos básicos que mejorarán la vida diaria de los vecinos de los municipios más despoblados.